En los tiempos remotos, durante la creación de la tierra, Dios reunió a sus ángeles para decidir un importante asunto: quería resguardar el secreto de la felicidad para que nadie lo dañara. Los ángeles opinaban que debían esconderlo en lo más profundo de los océanos, pero Dios recordó que los mares podrían secarse. Sugirieron dejar su secreto en el fondo del volcán más tenebroso, pero otra vez Dios no aceptó está idea porque los volcanes podrían apagarse.

Después de años de discusiones, Dios se pronuncio y, muy solemnemente, les dijo a los ángeles: «ya he tomado una decisión. Vamos a guardar el secreto en un lugar en el cual jamás las personas buscarían». ¿Dónde?, le preguntaron los ángeles. Y Él respondió: Lo esconderemos dentro de ellos mismos.

Todo lo que necesitas Dios te lo ha dado, te toca a ti aceptarlo y hacerlo realidad. La elección es tuya!!!

En amor y liderazgo,

Pedro Sifontes